Me la sé, me la sé...



Como en cualquiera de los exámenes finales que hemos hecho a lo largo de nuestras vidas, los floreros estábamos nerviosos el viernes por la tarde. No sabíamos a qué espécie de test nos enfrentaríamos, no sabíamos cómo estudiar, no sabíamos ni siquiera si había que estudiar...

En cuanto entraron las examinadoras (léase Ara y María) la tensión creció aún más si cabe. No tenían pinta de ser tan frías e implacables como se decía por ahí. Muy pocas personas habían conseguido aprobar sus exámenes hasta el momento, así que no nos dejamos engañar por sus caras angelicales y su facilidad por sonreir.

Tres candidatos. Tres técnicas distintas para intentar superar el test y poder relajarse. Román fue el primero en preparar el terreno, y empezó a cocinar unas estupendas doradas al horno. Ese detalle pareció dejar sin palabras a las examinadoras, que no dudaron en sugerir matrícula de honor para este avispado candidato. Así, de entrada, sin haber empezado el test!!
Un servidor detectó enseguida la estratégia utilizada por Román y empecé a preparar unos aperitivos a modo de "pa amb tomàquet" con unos deliciosos ibéricos y a servir como pinche a Román. Las examinadoras no parecieron impresionarse con esos dos detalles ni con las claritas que les ofrecí. Esto no iba a ser nada fácil...
En cuanto al tercer candidato, Zanti Pá, optó por sus mejores armas y empezó a relatar las maravillas de su Lanzarote natal, junto con un despliegue de medios audiovisuales que apoyaban su oratoria. Por desgracia, tampoco le sirvió de mucho.

La noche fue avanzando y empezaron a aparecer las primeras preguntas del test. Para nuestra sorpresa, las preguntas trataban escenas surrealistas de chicas, pañuelos, hielos y algún que otro avión de combate. Demasiada libertad a la imaginación...
Más tarde, alguna que otra copa en casa, excursión hasta La Sal para pegarnos allí unos bailoteos, y algún intento más de ganarse el aprobado. Nada, no daban ni una sola señal de flaqueza y seguían siendo igual de simpáticas que al principio. Como último detalle, sólo nos quedó ofrecer alojamiento a las examinadoras en la mejor suite de La Casa de las Flores, pero sabiendo que las podíamos convencer al día siguiente con uno de nuestros estupendos desayunos, desaparecieron temprano, dejando solamente una nota desconcertante de agradecimiento.

En estos momentos nuestro aprobado pende de un hilo, y seguramente seguirá así hasta el próximo viaje a Niza con las examinadoras. Esperemos que de una vez por todas podamos volver a casa con las notas. Seguiremos informando...

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5 Respuestas a “Me la sé, me la sé...”

  1. # Blogger Rucito

    En cuanto entraron, el saludo... ya amoroso.. por que ya había confianza de antes de esos días.. que no fue que yo tube que hacer ningún "secreficio"... ni se "seso"...que ellas se ponían voluntarias para cualquier gesto... cualquier palabra amorosa.
    ¡Yo ya he aprobado! ¿No tenéis "endivia"?.  

  2. # Blogger Esteve Viñas

    Envidia?? Estoooo....mmmm...que vaaaa...
    Mierda, no voy a aprobar nunca!!  

  3. # Blogger Rucito

    Sí, hombre. ¿Cómo no vas a aprobar?. Aunque te quede para septiembre u octubre o noviembre (en Niza).
    Yo, si quieres, te ayudo con el estudio.  

  4. # Blogger Arita

    Uyuyuy.. me parece que hay uno por aquí que para ganarse el aprobado nos echó DROJA EN EL ALBARIÑO!! ya decía yo... a ver si vamos a tener que impugnar el examen! a ver, dónde está el acta notarial?

    No me baneéis más :(  

  5. # Blogger Esteve Viñas

    Es verdad Rucito, todos decimos que estás aprobado, pero dónde está el acta de examen con la matrícula de honor?? Yo no me lo creo!!
    Arita, aquí no baneamos a nadie. A no ser que alguien quiera forzar un aprobado...  

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